Un reporte de El Confidencial indica que Latinoamérica
es una de las regiones más ricas en términos de biodiversidad. De hecho, es el
territorio del mundo que cuenta con mayor disponibilidad de recursos hídricos,
según la Comisión Económica para América Latina y el Caribe. A pesar de esta
abundancia, la contaminación de las aguas es un problema latente y recurrente.
Los
expertos del Banco Mundial advierten de que tres cuartas partes de las aguas
fecales o residuales de esta zona vuelven a los ríos y a otras fuentes
hídricas, creando un serio problema de salud pública y para el medioambiente.
“El 70% de las aguas residuales de la región no son tratadas. Sacamos el agua,
la usamos y la devolvemos a los ríos completamente contaminada”, señala Carmen
Yee-Batista, especialista en agua y saneamiento del Banco Mundial.
Las
constructoras españolas están viendo una oportunidad en este campo, y su
prestigio internacional favorece la adquisición de obras públicas enfocadas al
cuidado del medioambiente. Un claro ejemplo de esta situación es la costa de
Lima, inmersa en un proceso de regeneración desde el pasado mes de mayo. La
inauguración de la depuradora de La Chira, construida y operada por Acciona, se
ha convertido en un hito en el tratamiento de las aguas residuales de la
capital peruana. Hasta el momento, tres redes de alcantarillado de la ciudad
vertían directamente las aguas contaminadas al mar, sin haber sido tratadas
previamente.
Esta
situación provocaba todo tipo de perjuicios a la flora y fauna de la costa, así
como problemas de salud a la población, tanto digestivos como cutáneos. La
planta depuradora ayudará a la regeneración ambiental del litoral, lo que
supondrá una mejora no solo socioeconómica, sino también dirigida a recuperar
el turismo y el ocio de la zona.
Acciona construye la depuradora de La Chira
La
Chira tratará las aguas residuales de 18 distritos del sur de Lima, en el que
viven más de dos millones y medio de personas. Además, representa un importante
logro para la sociedad, ya que permitirá que el Estado peruano finalice su compromiso
con los Objetivos de Desarrollo del Milenio de la ONU de tener el 100% de las
aguas residuales tratadas en 2015.
La
construcción de la planta ha contado con una inversión de 97 millones de euros
y tendrá una capacidad media de tratamiento de 6,3 m3 por segundo, aunque puede
aumentar su rendimiento hasta 11,3 m3. La depuradora también dispondrá de un
sistema de neutralización de olores que, a través de bacterias, evitará la
contaminación ambiental que genera la utilización de químicos en este tipo de
procesos.
Planta de Tratamiento de Aguas Residuales La Chira |
El
agua ya tratada se devuelve al mar a través de un emisario submarino. El tubo
tiene 3.650 metros de longitud y ha sido uno de los grandes desafíos de este
proyecto, ya que su instalación, en pleno Océano Pacífico, ha requerido un gran
esfuerzo técnico y humano.
En
su montaje, los operarios tuvieron que hacer frente a condiciones climáticas
adversas. Para su correcta colocación a una profundidad de 58 metros, fueron
necesarias cuatro retroexcavadoras, un barco remolcador, un cargador frontal,
10 embarcaciones y más de 100 buzos.
Además
de las ventajas que ofrece la depuración del agua para el litoral, el proyecto
de Acciona se completa con una serie de acciones ambientales y sociales que
contribuirán a mejorar, aún más, la reconstrucción de la costa de Lima. Entre
estas medidas, destaca la repoblación de la flora de la zona, con la plantación
de más de 350 árboles y 2.500 metros cuadrados de césped.
La
sociedad también se verá directamente apoyada por la compañía. En primer lugar,
la mano de obra no cualificada implicada en el proyecto es 100% local. Además,
se ha desarrollado un plan para fomentar el tejido empresarial, impartiendo
talleres de nociones básicas de construcción y talleres de creación de
microempresas para mujeres.