Lima,20 de Mayo del 2020
Señor ingeniero Martín Alberto Vizcarra Cornejo:
Excelentísimo señor Presidente de la República
Me dirijo a usted, para expresarle respetuosamente mi preocupación por la senda en medicina curativa que viene transitando vuestra
administración en su lucha contra el COVID-19, soslayando la medicina preventiva.
El confinamiento obligatorio por largos periodos no ayuda en mucho a la medicina preventiva en un país andino y amazónico como el nuestro, que cuenta con un importante componente transversal en su dimensión ambiental.
El confinamiento obligatorio por largos periodos no ayuda en mucho a la medicina preventiva en un país andino y amazónico como el nuestro, que cuenta con un importante componente transversal en su dimensión ambiental.
La crisis ambiental del planeta
se manifiesta, entre otras consideraciones, con las consecuencias provocadas
por enfermedades infecciosas en la salud pública; por consiguiente es
imprescindible socializar la medicina preventiva en la población peruana, con
la finalidad que internalice las causas sui géneris de transmisión
del SARS-COV-2 en territorio peruano, una de las más altas de Latinoamérica y el mundo, impactando no
solamente en los mas de cien mil infectados y tres mil vidas perdidas en lo que va del presente brote epidémico; pensando en
el futuro de más de 32 millones de peruanos, su economía y la sostenibilidad
del país.
En ese sentido, reitero mi pedido - que va en la línea de lo expresado en mis sendas cartas abiertas de fechas 15 de marzo y 8 de abril del 2020 respectivamente - para que en el nivel que corresponda la toma de decisiones sustentada en ciencia, se considere un cambio de estrategia en la lucha contra el enemigo
invisible, tomando a la cuenca hidrográfica como unidad de gestión, en lugar de
la división política registrada en el tablero de comando.
Las condiciones y factores de riesgo infeccioso son motivadas por la presencia de toxinas en el medio ambiente identificadas en estas unidades de gestión, las cuales inficionan en individuos por su acumulación en el tiempo, afectando con ello su sistema inmunológico.
En estricto, la debilidad en la gobernanza y gobernabilidad ambiental que causaron la existencia de zonas insalubres como es el caso de Belen en Iquitos-Región Loreto, y otras tantas en el extremo de la costa norte y los cinturones de pobreza extrema en las regiones Lima y Callao , son producto de la suma de gobiernos - en sus tres niveles de gestión - que le antecedieron en la responsabilidad de conducir sus destinos.
Uno de los indicadores que sustentan mi petición se sustentan en los reportes epidemiológicos oficiales del ministerio de salud, los cuales acreditan que en las cuencas altas, las condiciones y factores de riesgo infeccioso precitados se diferencian sustantivamente de las poblaciones asentadas en las cuencas bajas.
Este cambio, de realizarse , permitirá focalizar el control de las zonas calientes del país, particularmente de Lima-Callao, la cual el 15 de marzo del 2020 contenía el 86% del total nacional de casos infectados confirmados y hoy 20 de mayo del 2020 - continuando el proceso de cuarentena - se mantiene con el 72% del total nacional de casos confirmados.
Las condiciones y factores de riesgo infeccioso son motivadas por la presencia de toxinas en el medio ambiente identificadas en estas unidades de gestión, las cuales inficionan en individuos por su acumulación en el tiempo, afectando con ello su sistema inmunológico.
En estricto, la debilidad en la gobernanza y gobernabilidad ambiental que causaron la existencia de zonas insalubres como es el caso de Belen en Iquitos-Región Loreto, y otras tantas en el extremo de la costa norte y los cinturones de pobreza extrema en las regiones Lima y Callao , son producto de la suma de gobiernos - en sus tres niveles de gestión - que le antecedieron en la responsabilidad de conducir sus destinos.
Uno de los indicadores que sustentan mi petición se sustentan en los reportes epidemiológicos oficiales del ministerio de salud, los cuales acreditan que en las cuencas altas, las condiciones y factores de riesgo infeccioso precitados se diferencian sustantivamente de las poblaciones asentadas en las cuencas bajas.
Este cambio, de realizarse , permitirá focalizar el control de las zonas calientes del país, particularmente de Lima-Callao, la cual el 15 de marzo del 2020 contenía el 86% del total nacional de casos infectados confirmados y hoy 20 de mayo del 2020 - continuando el proceso de cuarentena - se mantiene con el 72% del total nacional de casos confirmados.
En consecuencia, bajo la nueva estrategia nacional, que eventualmente demandaría una redistribución de asentamiento poblacional, similar a las aplicadas en caso de tsunamis, cataclismos, huracanes, entre otros eventos naturales; se abriría ventanas de oportunidades para la mejora en la calidad de vida de cientos de miles de personas que actualmente ocupan los focos infecciosos identificados con capacidad potencial de rebrote no solamente
a nivel de Perú sino de Latinoamérica.
Señor presidente, suscribo plenamente sus expresiones respecto a que "nos encontramos en una crisis de salud,social y económica sin precedentes", a la cual agrego que también el planeta y el Perú en particular se encuentra en una crisis ambiental sin precedentes, en razón a que con el COVID-19 hemos redescubierto que el uso desproporcionado de herbicidas como el glifosato se asocian a factores de riesgo del COVID-19 como la diabetes, obesidad,afecciones cardiacas, enfermedades respiratorias; de otro lado el impacto de productos que contienen triclosan y triclocarbán, por citar algunos con efectos bioacumulables que inciden en reducir el sistema inmunológico de las personas; sin perjuicio de mencionar la inseguridad alimentaria producto del uso incontrolable de pesticidas quimicos, riego con aguas residuales sin tratamiento, uso intensivo de cloro como desinfectante en aguas con tratamiento sin cumplir necesariamente los estándares de control y vigilancia, programas de inmunización descontrolados, entre otros que franquean el paso de virus y bacterias que reducen la defensa natural del cuerpo humano.
Finalmente, hago votos porque la presente carta llegue a su despacho y luego del análisis respectivo, pueda instruir a quien corresponda tomar las medidas adecuadas para revertir esta situación crítica, convocando a las fuerzas vivas de las cuencas del país y así pasar a reconstruir la patria con el concurso real y efectivo de todos los peruanos de buena voluntad.
Señor presidente, suscribo plenamente sus expresiones respecto a que "nos encontramos en una crisis de salud,social y económica sin precedentes", a la cual agrego que también el planeta y el Perú en particular se encuentra en una crisis ambiental sin precedentes, en razón a que con el COVID-19 hemos redescubierto que el uso desproporcionado de herbicidas como el glifosato se asocian a factores de riesgo del COVID-19 como la diabetes, obesidad,afecciones cardiacas, enfermedades respiratorias; de otro lado el impacto de productos que contienen triclosan y triclocarbán, por citar algunos con efectos bioacumulables que inciden en reducir el sistema inmunológico de las personas; sin perjuicio de mencionar la inseguridad alimentaria producto del uso incontrolable de pesticidas quimicos, riego con aguas residuales sin tratamiento, uso intensivo de cloro como desinfectante en aguas con tratamiento sin cumplir necesariamente los estándares de control y vigilancia, programas de inmunización descontrolados, entre otros que franquean el paso de virus y bacterias que reducen la defensa natural del cuerpo humano.
Finalmente, hago votos porque la presente carta llegue a su despacho y luego del análisis respectivo, pueda instruir a quien corresponda tomar las medidas adecuadas para revertir esta situación crítica, convocando a las fuerzas vivas de las cuencas del país y así pasar a reconstruir la patria con el concurso real y efectivo de todos los peruanos de buena voluntad.
Muy Atentamente
Dr Javier Prado Blas
DNI N° 08186048