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lunes, 21 de octubre de 2013

Política antiminera & EIA

El coordinador regional de América Latina de Revenue Watch Institute ,Carlos Monge, indicó en el foro: "Perú ¿futuro sostenible?", realizado la semana pasada en Arequipa, que se debe dejar de priorizar los proyectos mineros como fuente única de trabajo e inversión y adoptar un modelo de transición que permita ampliar la dimensión económica en el país.
Esta transición, explicó, debe permitir que otras actividades económicas, como la agricultura y la pesca, se posicionen en el mercado frente a la extracción y exportación de minerales, apoyando principalmente a la pequeña y media producción.
Añadió que el modelo extrativista heredado en los años 90 ha llegado al límite debido a los conflictos sociales.
En este escenario actual se continúa en los esfuerzos para levantar los impases subsistentes sobre el proyecto cuprífero Tía María
Southern Perú Cooper Corporation vuelve a la carga tratando de disipar los miedos sobre el proyecto Tía María en la provincia arequipeña de Islay.
La República, desarrolla una interesante descripción del proceso en los actuales momentos:
"El próximo jueves se programó el primer taller para dar detalles de la operación minera y Estudio de Impacto Ambiental (EIA). Son dos reservas de cobre ubicadas en pleno desierto de la costa sur, a 2.5 Km del valle de Tambo. Los agricultores temen que la mina contamine los cultivos y agote las fuentes de agua dulce destinadas al agro y consumo humano. Esos dos argumentos centrales agitaron la oposición al proyecto en 2011, que se cristalizaron en violentas protestas con un saldo de tres muertos y decenas de heridos. El clima de convulsión ocurrido en plena campaña presidencial obligó al gobierno aprista a cancelar el anterior EIA. Una auditoría externa de Unops le encontró 138 observaciones. El nuevo EIA lo hizo la consultora Geoservice durante un año. Los técnicos trabajaron con perfil bajo. El flamante director de Relaciones Institucionales de Southern y expresidente de la Cámara de Comercio de Arequipa, Julio Morriberón, señaló que esos cuestionamientos se subsanaron.¿Cómo se abastecerá la minera del agua, manejo del polvo, una posible contaminación con ácido sulfúrico y la licencia social?.
Aquí sus propuestas y las objeciones de los dirigentes.

EL MAR POR EL SUBSUELO

Southern necesita siete millones de metros cúbicos (m3) de agua para lixiviación. Este proceso libera el cobre de la roca triturada. La solución de agua y ácido sulfúrico cumple tal función.
El anterior EIA planteó tres posibilidades para obtener el recurso hídrico:
a) la explotación del subsuelo en donde existe un inmenso acuífero como consecuencia de filtraciones que provienen de los cultivos.
b) agua superficial con la condición de almacenarla en una represa que la compañía financiaría.
c) la última y más costosa era desalinizar el mar, se estima que tratar un litro de agua de mar cuesta un dólar. 
En 2011 se optó por el agua subterránea, lo que prendió la chispa de la protesta. Ante el rechazo, ahora la minera desalinizará el mar. La planta costará US$ 70 millones.
En el gobierno de García, el ministro del sector, Pedro Sánchez, dijo que la actividad extractiva generaría S/.367 millones por canon minero para la región Arequipa. Este cambio encarecerá en US$200 millones más el costo del proyecto. Y ello tendrá un efecto en la rentabilidad y el canon. Si se estimaba generar S/. 367 millones, ahora el ingreso alcanzaría a S/. 300 millones.

POLVO IRÁ AL DESIERTO

Richard Ale, alcalde de Deán Valdivia y opositor al proyecto, indica que la explotación de agua ya no está en cuestión y sería absurdo protestar. Sin embargo, hay otros puntos que todavía no tienen solución. Los pobladores temen la contaminación por polvo, que desprenderá la operación minera. El polvo, dicen, dañará sus cultivos, las doce mil hectáreas sembradas fundamentalmente de arroz. Según la minera, las explosiones para fracturar la roca se realizarán cuando el viento sople con dirección al norte, es decir al desierto, lado opuesto al valle y poblaciones. En un video,se precisa que el sonido de estas explosiones serán imperceptibles. Uno de los opositores al proyecto, Pepe Julio Gutiérrez, precisa que tendría que ser un “niño de teta” para creer eso. "Jamás hemos visto que hagan una prueba de vientos".También señala que durante el año las corrientes de aire no tienen una sola tendencia, por lo general son entrecruzadas, lo que descarta la tesis del EIA. “Le puedo apostar al mejor ingeniero de la Southern que eso no se podrá evitar”.

IMPERMEABLE A FILTRACIONES

Southern descarta una contaminación del subsuelo en el proceso de lixiviación. El mineral chancado se regará con la solución de agua y ácido sulfúrico en una cancha de 1,500 metros de largo por 300 de ancho. Para evitar filtraciones se hará una impermeabilización con una capa de arcilla. Sobre la arcilla se colocará una película plástica y sobre ella una capa de grava y sobre ella otra membrana de plástico. Además sensores que advertirán las filtraciones en cualquier punto de la cancha. El ácido sulfúrico es el ácido inorgánico más fuerte que existe, su ebullición se produce a temperaturas extremas, según la minera a más de 200 grados centígrados. Lo que descarta una evaporación y posteriores lluvias ácidas. Richard Ale está convencido que esta información es falsa. Precisa que no es necesario llegar a esas temperaturas para lograr la evaporación. “Soy químico puro, a mi no me van a engañar, les reto a que me prueben lo contrario. Cuando lavas tu ropa no esperas que hierva para que se seque, simplemente el agua se evapora, ¿o no?”.

LA LICENCIA SOCIAL,LA LUZ VERDE QUE FALTA

Para que el proyecto se concrete resulta indispensable dos tipos de aprobaciones. Una formal que depende de Energía y Minas, cartera a cargo de dar el visto bueno al EIA previo consentimiento de la población de la zona de influencia. Esta etapa es clave, al igual que la obtención de la licencia social. Un acuerdo más tácito, pero de igual importancia. La licencia se entiende como un consenso entre empresa, población y Estado, y en donde la primera se compromete no solo a desarrollar su industria, sino a contribuir con el desarrollo de las comunidades cercanas. Álvaro Torres, presidente de la Junta de Regantes del Tambo, cree que los talleres no serán objetivos. Señala que en éstos expondrán los técnicos de la minera cuando esa tarea debería hacerla Energía y Minas. Son ellos quienes deberían certificar el estudio. Solo así habrá más confianza. Gutiérrez tiene la seguridad de que por el momento no existen las condiciones para el taller. Y esas condiciones dependen de un trabajo de sensibilización. "La herida se mantiene fresca. La semana pasada, en una encuesta radial, todos estaban en contra del proyecto”, dice. Sin embargo, aclaró que hay hasta tres posiciones sobre el proyecto minero. Quienes se oponen radicalmente a la minería, los que están a favor y quienes están dispuestos a oír los nuevos planteamientos y luego tomar una decisión. Aunque parezca contradictorio, dijo, este escenario resulta positivo,cuando dos partes en conflicto creen tener la razón, siempre es bueno una tercera posición que puede abrir los ojos a cualquiera de los dos”, dice. Ambos dirigentes indicaron que asistirán al taller siempre y cuando se den las garantías y si la comunidad lo pide.“Esperemos que no nos provoquen poniendo quinientos policías, filmadoras por todos lados y haciéndonos firmar papeles. No nos responsabilizamos de lo que pase”, puntualizó Pepe Julio Gutiérrez. El proyecto de Southern comprende dos yacimientos de cobre, Tía María y La Tapada. Ambos se encuentran a 4 kilómetros uno del otro, al norte del distrito de Cocachacra, en la provincia de Islay. La Tapada se explotará en doce años (allí se minarán 817.5 millones de toneladas métricas -Tm- a tajo abierto). Y la segunda seis años.(399.9 millones Tm). Se estima que en la construcción habrá de 2 mil a 3 mil trabajadores directos y cuando funcione la mina 650. Es una enorme posibilidad de desarrollo, pero Southern tiene una tarea fundamental, recuperar la confianza perdida, misión que parece harto difícil. Lo reconoce Julio Morriberón, la minera se ha construido una imagen de haber contaminado el valle de Tambo en décadas pasadas con los humos provenientes de la fundición de Ilo. Abonó a la mala relación lo ocurrido con Tía María en donde faltó tino para tratar a dirigentes y alcaldes que inicialmente estaban de acuerdo con la inversión minera.

EN CIFRAS

  • US$ 300 millones anuales recibiría la región Arequipa por canon minero de Tía María. 
  • 138 observaciones tuvo el primer EIA que fue anulado por el Minem.
  • 3 muertos y cientos de heridos dejaron los enfrentamientos en Cocachacra en el 2011".