Un problema importante asociado al uso efectivo de los recursos financieros del canon minero es la poca preparación para elaborar propuestas participativas que cumplan con los requisitos técnicos establecidos por el Estado peruano.
Este impase subsistente, deviene en una de las causas que el crecimiento económico e inversión social no se vean reflejadas en sustanciales mejoras de los estándares de vida en localidades donde se desarrolla la actividad minera. (Pese a importantes sumas de dinero destinadas a programas de relaciones y desarrollo comunitarios).
Proyectos integrales y de gran impacto social son escasos y en cambio, proliferan un conjunto de pequeños proyectos dispersos que generalmente no guardan mayor relación entre sí.
El país se encuentra en la necesidad de desarrollar mayores planes y acciones consensuadas de responsabilidad social, siguiendo las experiencias de los antiguos peruanos quienes demostraron capacidades para planear, ejecutar y gestionar infraestructura de gran impacto y sostenibles en el tiempo.
Los antiguos peruanos demostraron capacidades para planear,ejecutar y gestionar infraestructura de gran impacto y sostenibles en el tiempo. |
En este contexto, no es accesorio, que la administración del Estado asuma su rol de tomar conocimiento de las capacidades socioeconómicas locales a fin de fijar ordenamientos territoriales en conexión con los múltiples actores locales.
Resulta más que una frase o proposición teórica fomentar la identificación, elaboración y ejecución de proyectos consensuados, tanto con la población beneficiaria, como con las autoridades regionales y locales.
Experiencias de proyectos que pudieran ser exitosos en algunas regiones, no necesariamente pudieran funcionar con la misma efectividad en otras, esto en virtud a las múltiples diversidades existentes en territorio peruano. (Diferenciaciones marcadas por los distintos pisos altitudinales,cuencas,climas,poblaciones,etc)
Es importante pues que todas las iniciativas de proyectos, se realicen concordadas con la dimensión local.
Seguidamente se podrá apreciar un informe sobre una posibilidad del sector exportador en Agricultura y Turismo, dando cuenta en éste último una exitosa experiencia de asociación público-privada para poner en valor monumentos históricos, sustentado en un paquete legislativo aparentemente no concordado con las normativas locales que mereciera la disconformidad y protesta en la región Cusco (2008).
En analogía, las dificultades observadas para algunas zonas mineras, es que no se perciben agendas claras, consensuadas e incorporadas al desarrollo de espacios geosociales.
En el espectro de las discusiones sobre : calidad del gasto público, inversión privada, instancias de reclamo socio ambientales, conciliación del abanico de intereses, entre otras; la inversión social corporativa debe apuntar a dar soluciones a largo plazo con planes de desarrollo participativo, independientemente del inicio de los procesos de concesión mineros.