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jueves, 27 de agosto de 2015

Trilogía: Agua&Agricultura&Minería

Nada ha cambiado a dos semanas de vencerse los 60 días de suspensión de operaciones del proyecto minero Tía María, en Arequipa. Mientras Southern Perú ha puesto en marcha una campaña nacional de comunicación sobre su futura intervención, en la zona un amplio sector de la población se mantiene alerta para retomar la protesta en cualquier momento. La resistencia local a la multimillonaria operación de extracción y exportación de cobre, y la serie de hechos que le han sucedido, han traído de vuelta desde el pasado reciente una discusión que, por poco frecuente, parece haber quedado congelada en el tiempo.
¿Pueden la minería y la agricultura, con operaciones en un mismo espacio geográfico, llegar a ser buenos vecinos? ¿O es el impacto de la minería sobre zonas agrícolas irremediablemente nocivo? El Perú se ha negado ya la posibilidad de responderse esas preguntas. Y no ahora, sino hace un tiempo. Lo hizo específicamente hace 13 años, cuando la protesta social en el departamento de Piura consiguió la cancelación de Tambogrande, el frustrado proyecto aurífero de la minera Manhattan, que reposaba sobre buena parte de un valle de producción agrícola. Lejos de desaparecer, sin embargo, el dilema regresa con renovada vigencia.
No es cosa menor que en el Perú no exista hasta hoy una experiencia positiva o negativa de convivencia entre ambas industrias, que sirva como referente para la toma decisiones sobre la viabilidad de un proyecto. Y no lo es no solo porque la industria minera representa el principal ingreso de la economía peruana, sino por el peso del Perú en el mercado mundial de minerales: si tal modelo de armonía no existe aquí, probablemente tampoco exista en otras latitudes.
Queda, por tanto, abordar la interrogante desde la teoría sobre la que hoy reposan los pros y los contras. PODER convocó a cinco expertos para intentar resolver el misterio, y proyectar efectos y resultados. Mientras algunos consideran que tal modelo de coexistencia es perfectamente posible gracias a la tecnología, otros coinciden en que de no cumplirse una serie de condiciones mínimas –más allá de las técnicas– se echaría por la borda cualquier intento de convivencia. En lo que están de acuerdo todos es en esto: nada permanece igual para un ciudadano y una comunidad, ni para su espacio físico, tras el arrollador arribo de una empresa minera.

De Tambogrande a Valle de Tambo

Como se ha dicho ya, lo que hizo polémico en su momento a Tambogrande, y hoy a Tía María, es que sean casos de absoluta excepción a la regla en la historia de la minería en el Perú. Desde los inicios de esta industria en nuestro país, esta –a gran escala– se ha instalado predominantemente en dos tipos de ecosistemas: la puna y la alta montaña. Se trata de espacios donde el dilema de la coexistencia minería-agricultura prácticamente no existe, en la medida en que la producción del campo no es parte fundamental de las actividades económicas de la zona. No es el caso de Tambogrande ni el de Tía María, donde el tajo minero se proyecta sobre valles agrícolas. Allí el dilema.
Manuel Glave, investigador de Grade, explica que eso hace que las preocupaciones de la población sean diferentes según la zona donde se ubica un proyecto minero. Así, dice Glave, mientras en la puna peruana el dilema tiene que ver con los derechos de comunidades pastoriles y la propiedad de la tierra, para casos como el de Tía María la preocupación es no tener información confiable sobre cómo afectará la llegada de esta industria a un espacio predominantemente agrícola, productivo, que genera riqueza y empleo y tiene mediano éxito.
“Los casos de Tambogrande y Tía María son diferentes dentro de la industria minera, por el piso altitudinal donde se encuentran. No son Tintaya, Antamina, Toromocho o Las Bambas (ubicados en zonas geográficas comúnmente mineras). Entonces, el no tener experiencia previa que demuestre que minería y agricultura pueden coexistir armoniosamente vuelve a estos proyectos polémicos desde el inicio. Y no es casual que hayan encontrado el rechazo y la preocupación de los agricultores. No conozco otros casos tan crudos, en el sentido de un proyecto de mediana escala intentando instalarse en medio de un valle agrícola extenso”, dice Glave.
Pero así como las preocupaciones sobre la irrupción de un proyecto minero dependen directamente del lugar geográfico donde se instale, la resistencia de la población a una inversión de este tipo es inversamente proporcional al nivel de desarrollo del que goza: una comunidad de mediano desarrollo, conectada al mercado y con oportunidades económicas producto de su relación con el uso de la tierra, será más reticente a la minería que una comunidad pobre, sin oportunidades de desarrollo, que podría ver en ella cierta esperanza de progreso. Carlos Monge, director para América Latina del Natural Resource Governance Institute, desarrolla esta idea.
“En casos de expansión de la actividad minera donde hay usos de la tierra, y donde además esos usos son relativamente exitosos, tienes un potencial de conflicto muy grande. Porque, ojo, Tía María no está proyectando llegar a una comunidad campesina pobre, estamos hablando de zonas más modernas, más prósperas y capitalistas, de pequeña y mediana producción agrícola. En contraste, cuando la mina llega a zonas de pobreza extrema es posible que haya más aceptación, porque allí pueden sentir que no tienen nada que perder, y que, por el contrario, pueden sacar algún provecho”, afirma Monge.
Dado que, debido a las legítimas preocupaciones de la población, no ha sido posible hasta hoy concretar ningún proyecto minero en el Perú que comparta su espacio con una agricultura intensiva, cabe hacerse una pregunta diferente: ¿qué condiciones mínimas debería cumplir la minería para compartir armoniosamente el espacio con actividades agrícolas, vencidas las resistencias sociales? La primera de ellas es, sin duda, asegurar las condiciones del acceso de todos los actores al agua.

Problema de fondo

La mayoría de conflictos sociales por actividades extractivas en el Perú están directamente relacionados con asuntos medioambientales. Y muchos de los casos medioambientales están relacionados con el agua. En el 2010 la Red Muqui, un conjunto de instituciones abocadas al desarrollo sostenible y a la defensa de poblaciones en áreas de influencia minera, identificó a partir de información de la Defensoría del Pueblo que, de los 246 conflictos sociales registrados en el país, 117 eran socioambientales, y que 28 de ellos giraban en torno al agua en zonas mineras.
Pese a las múltiples alertas, el Estado no ha puesto mucha atención al problema del agua. Y no solo a aquellos casos que registran contaminación directa de fuentes del recurso hídrico, sino a la escasez y disputa de su administración en diversos puntos del país. El año pasado, por ejemplo, una investigación periodística de La República reveló que las autoridades peruanas no saben con certeza el volumen de agua disponible en 119 de las 159 cuencas que proveen este recurso a todo el país. La ausencia de información de este tipo es grave, toda vez que evita proyectar un suministro a futuro y velar por una buena distribución de los caudales a las industrias que más los necesitan: agricultura, minería, electricidad y uso doméstico.
Sobre este último punto, Manuel Glave, de Grade, llama la atención sobre la completa ausencia de una política de planificación en el país respecto al uso y administración del agua. Esta realidad agrava polémicas como la de agricultura versus minería, al no existir institución estatal que pueda asegurar técnicamente –en este caso, a los agricultores del Valle de Tambo- un suficiente suministro del recurso hídrico en futuro.
“Es cierto que una operación minera termina afectando el acceso al agua, pero para eso la Autoridad Nacional del Agua (ANA) debería contar con una balance del recurso hídrico y una proyección de su disponibilidad a 50 años. Y no estamos hablando aquí solamente de un balance de uso agropecuario, sino de uno estratégico para todos los usos, que permita comparar la oferta y la demanda. La existencia de estudios de ese tipo permitiría tomar decisiones importantes, porque podrías saber si favoreciendo una actividad económica vas a afectar a otra. Que ese estudio no exista solo genera más incertidumbre”, dice Glave.
Pero la carencia de información estratégica no es el único problema; también se trata de la infraestructura. El conflicto por Tía María en el Valle de Tambo es el ejemplo más reciente de cómo la mala planificación de proyectos de irrigación por parte del Estado –se le prometió al valle cuatro represas en los últimos 30 años, pero nunca llegaron–, aunada a la falta de credibilidad y eficiencia en prácticas ambientales, como en el caso Southern Perú, pueden confluir en el estallido de un conflicto que ya lleva cinco muertos y cientos de heridos.
Carlos Monge, de Natural Resource Governance Institute, resalta la importancia del agua para el desarrollo de proyectos mineros en convivencia con la agricultura. “Una condición importante para que ambas actividades coexistan es que, primero, haya abundancia de agua, además de la existencia de una estrategia productiva tal que permita que la actividad minera no destruya, se apropie o contamine fuentes de agua en perjuicio de los actores con los que comparte la zona, sino que, por el contrario, incluso las mejore”, afirma.
Monge considera que, en principio, ambas actividades sí podrían convivir, al menos teóricamente. Pero además del agua, como ya se ha dicho, es sumamente importante también la ubicación exacta del proyecto, la conformación del mineral en el yacimiento, los niveles de toxicidad de los minerales que se planea explotar y las relaciones con las comunidades. Hasta el momento, como hemos comentado, no existe experiencia exitosa de convivencia entre minería y agricultura, o no al menos en operaciones del tamaño de Tía María. Pero la minería en el Perú sí ha tenido otros logros destacables, como el reasentamiento poblacional en Morococha –de unas 10.000 personas–, o casos notables de negociación como el de Quellaveco.

Servinacuy minero

En medio de la tensión que a principios de la década pasada se vivió en Piura por las protestas contra el proyecto aurífero que intentaba posarse sobre Tambogrande, la minera junior canadiense Manhattan Minerals optó por revisar la casuística internacional para diseñar un discurso que demostrara su viabilidad en una zona fundamentalmente agrícola.
Paul Sweeney, CEO de la compañía minera, afirmó por entonces que las relaciones con las comunidades en Tambogrande eran buenas, aunque luego la experiencia terminaría por desmentirlo. En la consulta popular que se llevó adelante en la zona buscando aprobación social, el proyecto de Manhattan sufrió una derrota aplastante. La negativa de la población se dio pese a que un grupo de profesionales y dirigentes de Tambogrande –incluido el alcalde– fue invitado a visitar y conocer la experiencia de la mina Candelaria, cerca de Copiapó (Chile). El objetivo era, supuestamente, convencerlos de que una feliz convivencia entre minería y agro sí era posible.
Pero sobre este caso, citado internacionalmente como una supuesta experiencia positiva agro-mina, existe un estudio elaborado por CooperAcción según el cual no todo es como parece. El informe revela que Manhattan, en su objetivo de convencer a los piuranos, omitió detalles importantes al tomar como ejemplo el caso chileno. La mina, por ejemplo, tenía poco tiempo operando, lo que no permitía observar las consecuencias a largo plazo de la convivencia entre ambas actividades. El caso de Copiapó tampoco podía servir para hacer un paralelo con el proyecto peruano, toda vez que la zona de Chile donde se instaló no está sujeta a las complicaciones de suministro de agua que sí se dan en Tambogrande.
A propósito de las consecuencias a largo plazo, un informe del 2009 elaborado por el Centro de Investigación Periodística (Ciper) de Chile da cuenta de las preocupaciones que experimentaban desde el gerente de las mineras hasta el más pequeño de los agricultores: como consecuencia de ambas actividades y de los mecanismos de venta de derechos de agua, se habían sobreexplotado las fuentes y se había llegado a un estrés hídrico crónico. El informe también detalla los conflictos que ocurrieron entre agricultores locales y la minera Candelaria por el uso de pozos y aguas tratadas.
“He tenido la oportunidad de visitar la zona [Copiapó] varios años después del conflicto de Tambogrande, y no es un buen ejemplo”, afirma José de Echave, director de CooperAcción. “Los agricultores tienen demandas judicializadas contra la minería en esa zona”.
Otro caso usado por Manhattan para promover su proyecto a partir de la comparación fue el de Martha Mine, en Nueva Zelanda. Un documento elaborado por el geólogo Robert Moran para Oxfam señaló que si bien se trataba de una mina de oro y plata en una zona agrícola, la coexistencia de esta actividades –como en Copiapó– era demasiado reciente como para sacar conclusiones, y, además, la frecuencia y el nivel de lluvias la convertía en un caso poco preciso para comparar con la realidad piurana.
Un tercer caso citado como ejemplo fue el de la mina Stillwater, en Estados Unidos. Pero aquí, en un informe del 2005, CooperAcción señaló también otras omisiones: la composición química de los minerales explotados era distinta de la de Tambogrande, que en el área circundante solo se cultivaban pastizales y que la villa más cercana se localizaba a más de 50 kilómetros de distancia.

Puntos encontrados

Luego de listar los casos precedentes, surge una nueva pregunta: ¿es entonces imposible la convivencia entre agro y minería? “La respuesta se relativiza dependiendo del tipo de agricultura del que estamos hablando, y del tipo de minería también. No todos los yacimientos son iguales y no toda la agricultura lo es. No es lo mismo una agricultura de pastizales que una frutícola”, afirma  José de Echave. E insiste que en el Perú no se ha dado hasta el momento un caso de coexistencia entre minería y agricultura intensiva o de mediana envergadura, como la que hay en el Valle de Tambo.
Rómulo Mucho, expresidente del Instituto de Ingenieros de Minas del Perú (IIMP), discrepa. Mucho considera que este fenómeno sí ha ocurrido en nuestro país. Pone el ejemplo de minera Cerro Verde, en Arequipa. “La presa de relaves está cerca del valle de Uchumayo. No es un valle muy fructífero, porque es angosto, pero en las tierras aledañas se producen cebollas”, asegura, aunque, como él mismo declara, no se trata de una agricultura de escala similar a la del Valle de Tambo.
Cerro Verde no ha estado libre de conflictividad social. Hace poco, según reporta el diario arequipeño El Búho, representantes de la Junta de Usuarios La Joya Antigua criticaron que la Autoridad Nacional del Agua (ANA) haya autorizado la reutilización de aguas residuales tratadas para uso minero, lo que afectaría el suministro para el agro. Se trata definitivamente de un problema serio, aunque no haya escalado en magnitud.
Pero un caso que según Mucho se asemeja un poco más al del Valle de Tambo es el de la minera Colquisiri, en Huaral. Se trata de una mina polimetálica asentada en pleno valle, con extensos cultivos de naranjas a menos de un kilómetro de la operación. En el 2011, según medios locales, hubo quejas por parte de dirigentes de centros poblados de Jecúan, Cerro Cenizo y Tres Estrellas, quienes acusaban a la minera de afectar la producción agrícola de la zona y poner en riesgo la salud como consecuencia de un mal manejo de relaves.
“El tema pasa por que la mina controle todas sus emisiones y use tecnología. Así es totalmente viable. Esto sucede en Canadá, Estados Unidos, Australia, Chile”, declara Mucho. “Yo creo que en el Perú es totalmente factible la coexistencia. Y afirmo que Tía María no va a afectar el valle”.
Otro componente importante para la paz y la buena vecindad es la participación de la mina en la promoción del agro. Ricardo Labo, de Labo Mining Strategies, destaca el caso de la mina Northparkes, en Australia. En el 2012, el diario The Australian detalló el caso de la incursión de la mina en una de las zonas agrícolas más ricas de Nueva Gales del Sur. Durante varios años hubo disputas entre los campesinos y mineros por el uso que se les iba a dar a las tierras. Hasta que en 1997 la empresa entró a invertir decididamente también en agricultura. Así, Northparkes añadió a su estructura organizacional un negocio agrícola que no es pequeño: según Mining Weekly, solo el 30% de las tierras de la compañía son usadas para explotar oro y cobre; el resto está ocupado por hectáreas donde se cultiva cebada, trigo y canola.
Como señala The Australian en su artículo, si bien la agricultura no representa una gran ganancia para Northparkes, las tierras han servido para probar nuevos métodos de cultivo y hacer que las localidades circundantes se desarrollen. Incluso hubo un año –el 2003– en que las pérdidas de la minera fueron de alguna manera atajadas por las ganancias de la rama agrícola de su negocio. En este caso específico, incluso los cultivos de la propia minera servían como zona de amortiguación entre las operaciones propiamente mineras y las tierras agrícolas privadas de sus vecinos. ¿Será posible hacer esto en el Perú? ¿Qué empresa minera criolla podría tener esta visión?

domingo, 23 de agosto de 2015

32 Edición de la convención minera

Del 21 al 25 de septiembre del 2015 se realizará PERUMIN - 32 Convención Minera, y su presidente, Roque Benavides Ganoza, estuvo en el programa RUMBO MINERO TV.
El Presidente Ejecutivo de Compañía de Minas Buenaventura informó sobre los avances de la organización y realizó un análisis de la situacion del sector minero, enfatizando la importancia de realizar un diálogo donde participen las agrupaciones que se oponen a esta actividad económica.
"Nosotros tenemos que identificar o discutir como peruanos qué cosa es lo que queremos hacer con nuestros recursos naturales, cómo podemos potenciarlos. En esa línea, creo que hay un campo común entre las ONG antimineras y el sector minero formal. Entonces creo vamos a ver cómo podemos conciliar con ellos a través del diálogo y la exposición de ideas", declaró Roque Benavides.
Agregó que PERUMIN tendrá mesas donde estarán presentes Alberto Moreno, presidente de Patria Roja y de Marco Arana, de quien comentó se espera explique su posición.
También mencionó que se realizará un panel con los CEOs de empresas mineras de Perú, y en el cual estarán Óscar Gonzales Rocha, presidente del directorio de la empresa Southern Perú; José Picasso, presidente de Volcan; Víctor Gobitz, CEO - Gerente General en Compañía Minera Milpo.
De otro lado, para esta edición de PERUMIN la educación será uno de los principales temas que se abordarán. En ese sentido, el empresario detalló que el discurso inaugural estará a cargo del titular del Ministerio de Educación (MINEDU), Jaime Saavedra.
 "Jaime Saavedra es una estrella en este gobierno, porque ciertamente ha tenido un labor destacada. Por supuesto, la idea será hablar de cómo mejorar la educación tanto a nivel escolar como nivel universitario, y cómo podemos enfrentar el futuro", indicó Roque Benavides.
También se espera la participación del Ministro de la Producción, Piero Ghezzi, y de la titular del Ministerio de Energía y Minas (MEM), Rosa María Ortiz.

sábado, 22 de agosto de 2015

Impacto ambiental recurrente como tema de seguridad y orden interno

En Estado, pasivos ambientales y conflictos sociales, que publicamos casi hace un quinquenio atrás, en situación previa al cambio en la administración del gobierno nacional peruano ocurrido en el 2011; describimos un lapso en donde los conflictos mineros escalaban y ponían en riesgo el desarrollo de la minería. Hoy la minería en Perú esta fuertemente impactada.
Cinco años después, nos encontramos en un escenario similar, pues el 2016 habrá el cambio democrático en la jefatura del Estado, mirando una situación recurrente en los conflictos sociales que continúan, siendo las protestas cada vez más violentas.
Hicimos mención entonces de sucesos ocurridos en Cajamarca,Cusco,Arequipa y Ancash. En esta última citamos eventos antimineros en las ciudades de Huaraz y Recuay, indicando que no debían ni podían ser soslayados.
Decíamos entonces que "con el uso de la violencia se atentó contra instituciones públicas y privadas,bloquearon carreteras,paralizándose la ciudad sin que el estado de derecho pudiera detener esta escalada de anarquía y destrucción".
Meses previos al año electoral 2016, tenemos el añadido que científicamente se anticipa un evento de singular magnitud con el denominado fenómeno "El Niño" que se presenta histórica y recurrentemente afectando al territorio nacional.
El cambio climático afectará los distintos pisos altitudinales existentes en el país y en especial, aquellas zonas especialmente vulnerables ya conocidas en Perú.
Es momento de trabajar preventivamente en la praxis y no quedarse en iniciativas legales que la práctica burocrática entorpece en los tres diferentes niveles de gestión del gobierno.
"Impactos ambientales que se traducen en un tema de seguridad nacional y orden interno".
En este contexto, el sistema de defensa civil debería redoblar esfuerzos para prepararse en las distintas jurisdicciones del país y en especial en zonas vulnerables y muy sensibles del país.
Asimismo, la oficina nacional de gobierno interior (ONAGI), instrumento del Poder Ejecutivo para fortalecer la presencia del Estado en todo el territorio nacional, debería mejorar sus actuación en prevención coadyuvando a la gobernabilidad del país,  mantenimiento del orden interno y orden público.

domingo, 16 de agosto de 2015

Tucuy Ricuy y ONAGI en Perú

El TucuyRicuy (“ El que todo lo ve, quien todo lo oye”) era una especie de agente secreto de los incas.Eran funcionarios estatales que viajaban de incógnitos por las diferentes regiones del imperio,observando la forma como se aplicaban las leyes y disposiciones del Inca.En el momento preciso se identificaban ante los habitantes por medio de unos hilos de la mascaypacha del Inca, luego de lo cual empezaban su labor visitaba los lugares de su responsabilidad para informar al Cuzco. Visitaba también las obras públicas y solía correr con  la información de todo  lo observado y actuado, al Hijo del Sol, cuando las cosas iban bien o mal y este tomaba las medidas respectivas oportunamente.
Hoy por hoy su nuevo mundo en Perú, sus herederos ya no son más parte de los incas ahora pertenece al sistema de las nuevas gobernaciones que dependen del ministerio del interior del ejecutivo peruano.Estos vendrían a ser los ojos y oídos de la presidencia de la república y en la actualidad se articulan en la oficina nacional de gobierno interior (ONAGI), representando al Poder Ejecutivo en el ámbito de su jurisdicción y fortaleciendo la presencia del Estado en todo el territorio nacional, coadyuvando a la gobernabilidad, al seguimiento y ejecución de las Políticas Nacionales, al mantenimiento del orden interno y orden público, y a la paz social.
En este contexto, ONAGI es un organismo público ejecutor, con autonomía administrativa, funcional y económica, que en el ejercicio de sus funciones, contempla la presencia del Estado en todo el territorio nacional.  Tanto  el Decreto Legislativo 1140, (10/12/ 2012) y el Decreto Supremo 003-2013-IN, formalizan la estructura orgánica de ONAGI.
ONAGI, conforme a su reglamento de organización y funciones , se compone de cuatro direcciones generales, como órganos de línea : La Dirección General de Autoridades Políticas; La Dirección General de Autorizaciones Especiales;La Dirección General de Supervisión, Fiscalización y Sanciones; y la Dirección General de Desarrollo de Capacidades y Evaluación. Es en este contexto que la prevención de conflictos sociales, socioambientales y afines, en sectores estratégicos como es en el caso del sector energía y minas debiera estar atendido oportunamente, tarea que al parecer no se estuviera ejecutando adecuadamente a la luz de los resultados presentados en el evento de enfrentamientos entre la policía y trabajadores mineros del paralizado complejo metalúrgico de Doe Run.

jueves, 13 de agosto de 2015

Perú & Colombia contra minería ilegal

A través del acuerdo binacional suscrito hoy entre Perú y Colombia, sobre la adecuada gestión de sus espacios naturales, se abre un espacio para combatir de manera conjunta las actividades criminales como la minería ilegal en la zona de frontera entre ambos países, destacó el Ministerio del Ambiente (Minam).
Manuel Pulgar-Vidal, titular del Minam, recordó que uno de los elementos centrales de los acuerdos alcanzados en el gabinete binacional Perú-Colombia, realizado en el 2014 en la ciudad de Iquitos, fue el de control compartido de minería ilegal.
"Sabemos los colombianos y los peruanos que el problema de la minería ilegal en el Putumayo es severo. Y cuando Colombia descubre una draga, esa draga cruza al otro lado de la rivera del río, le pone bandera peruana y entonces escapa del control colombiano, y viceversa", aseveró.
En tal sentido, reiteró que acuerdos como el suscrito hoy entre Perú y Colombia ayudan a establecer mecanismos de conservación y colaboración que permiten enfrentar amenazas como la tala ilegal, el tráfico de diversidad biológica e incluso el narcotráfico.
"En el Perú se presentan situaciones de cultivos de coca muy cerca a la triple frontera entre Perú, Colombia y Brasil, cerca a Leticia. Y por lo tanto debemos tener mecanismos que desde la conservación nos permita cooperar para luchar contra ese tipo amenazas", manifestó.
Pulgar-Vidal consideró además que este acuerdo entre Perú y Colombia para establecer alianzas con énfasis en estrategias de conservación y de desarrollo para las poblaciones asentadas en las áreas naturales protegidas (ANP).
Recordó que durante su visita al Parque Nacional de Güeppí, pudo constatar el trabajo que realizaron, en esa oportunidad, los guardaparques, autoridades y población de las ANP de Perú, Ecuador y Colombia, para establecer estrategias conjuntas para conservar un ecosistema.
"Si bien es cierto existen fronteras políticas como ecosistemas no tienen fronteras", manifestó el titular del Minam en declaraciones a la Agencia Andina.
Sostuvo asimismo que las ANP que se ubican en áreas de frontera tienen en si un concepto de paz, que ha permitido un entendimiento que desde la conservación se pueden establecer relaciones binacionales más ejemplares que las que muchas veces se pueden obtener incluso desde la diplomacia.
"La conservación se convierte de una manera indirecta en un agente de la diplomacia nacional en su relación con el país vecino", expresó.

lunes, 10 de agosto de 2015

Efecto por bajos precios en minerales

Semana Económica explica el impacto de los menores precios internacionales de los metales en los siguientes términos:
En el primer semestre del año la empresas mineras continuaron siendo afectadas por los efectos de menores cotizaciones internacionales de los minerales. El precio del oro cayó  7% interanual, la plata 20%, el cobre 14% y el plomo 16%. Esta caída hizo que las mineras busquen incrementar sus eficiencias y reduzcan costos, pero no detuvieron la caída en el precio de sus acciones.
Buenaventura (BVN) registró una pérdida de US$1.4 millones en el primer semestre, tras fuertes pérdidas en el segundo trimestre. Los ingresos del primer semestre disminuyeron 13% (US$75 millones) por menores cotizaciones y menores volúmenes de producción y comercialización de oro. Además, un incremento de 6% en sus costos de ventas. La acción (BVN) venía cotizando por encima de los US$10, pero en el último mes cayó 35.9% y alcanzó los US$6.53. A pesar de la caída la acción, varias casas de bolsa recomiendan comprarla o al menos mantenerla. El “precio objetivo”  de la acción es mucho mayor , según proyecciones de JP Morgan (que proyecta un precio objetivo de US$14), Morgan Stanley (US$13.20), Inteligo SAB (US$11.60), LarrainVial (US$12) y Credicorp Capital (US$11.6).
Para Cerro Verde (CVERDEC1), su utilidad cayó 83% a los US$39.7 millones, debido principalmente 38% menores ingresos (por menores precios del cobre) y a una perdida cambiaria de US$43 millones asociada a los créditos por impuesto a la renta e impuesto general a las ventas y pagos asociados al fraccionamiento por regalías mineras. La acción  de Cerro Verde cayó 11.36% en el último mes y llego a los US$19.5. Las recomendaciones para esta acción son diversas: Inteligo SAB recomienda comprar, y le asigna un precio objetivo de US$23.66; Kallpa SAB (US$21) y BTG Pactual (US$29.6) tienen una recomendación neutral/mantener; LarrainVial (US$18) y Credicorp Capital (US$17.4) recomiendan subponderar/vender.
Los ingresos de Volcan (VOLCABC1) cayeron 18% en el primer semestre por retrocesos en los precios de la plata y el plomo, que fueron contrarrestados por mayor producción de plata y zinc. Sin embargo, la empresa logró reducir en 20% sus costos de ventas gracias a sus medidas de reducción de costos. La utilidad neta cayó 15% y alcanzó US$25.9 millones. El precio de la acción se mantuvo en niveles cercanos a S/.0.6, pero en el último mes ha caído un 31% y llegó a cotizarse en S/.0.45. Pesar a los menores resultados, en el último mes la acción tiene cuatro recomendaciones de compra: de Inteligo SAB (que proyecta un precio objetivo de S/.0.98), BTG Pactual (S/.1.47), Kallpa SAB (S/.0.92) y Credicorp Capital (S/.0.8); y una de mantener de Larrain Vial (S/.0.7)
En el caso de Milpo (MILPOC1), sus ingresos del primer semestre se redujeron en 8% a US$348 millones por menores ingresos de concentrados de cobre y plata, a pesar de un aumento en ingresos por concentrados de zinc de US$10 millones. Su utilidad cayó 35% a US$40 millones, luego de que la utilidad en el segundo trimestre fuera de sólo US$22.1 millones (-35% interanual). La acción cayó 16% a S/.2.25 en el último mes y lleva una caída de 4% en el semestre. Las recomendaciones de los analistas son de compra para Kallpa SAB (S/.3.28), Inteligo SAB (S/.3.23) y BTG Pactual (S/.3.35); y de mantener para Larraín Vial (S/.2.65) y Credicorp Capital (S/.2.4).
Por último, las utilidades de Minsur (MINSURI1) cayeron en 79% y sus ingresos en 37%. Esta caída se dio debido a que sus ingresos por estaño (principal mineral) se redujeron en 47% a US$183 millones en el primer semestre del año. La acción cayó 17% en el último mes a S/.1.08, mientras que en lo que va del año tiene una caída de 38%. Tiene recomendaciones de compra de Credicorp Capital (S/.1.50) y de Inteligo SAB (S/.2.16), y una recomendación de mantener de Kallpa SAB (S/.1.29).
Los resultados financieros del tercer trimestre podrían continuar así de negativos o inclusive empeorar si los precios de los metales se mantienen bajos. Si bien las mineras redujeron costos (debido a menor precio de petróleo y depreciación del sol con respecto al dólar) no habrá más margen para mayores reducciones, según Sebastián Cruz, Analista de Kallpa SAB. “No van a poder reducir costos tan rápido como lo hacen los precios”, afirma.

domingo, 2 de agosto de 2015

¡ US$ 34,020 millones en 4 años !

Las inversiones mineras en el Perú alcanzaron los US$ 34,020 millones en los cuatro años que van del actual periodo de gobierno, obteniendo un crecimiento del 142% en comparación con lo invertido entre el 2006 y 2011 (US$ 14,039 millones), informó hoy la Dirección General de Minería del Ministerio de Energía y Minas (MEM).
Asimismo, lo ejecutado en estos últimos cuatro años representa el 60% de toda la inversión realizada en minería desde enero de 1996 a mayo de 2015, que asciende a US$ 56,367 millones.
Según proyecciones del MEM, se espera que a julio de 2016, el nivel de inversiones mineras realizadas en este gobierno alcance los US$ 42,610 millones; es decir, triplicaría la inversión obtenida en la gestión anterior.
Con la ejecución de los proyectos mineros en cartera, se espera duplicar la producción actual de cobre, asegurando recursos para que éste y los siguientes gobiernos puedan implementar y continuar los programas sociales que la población necesita.

El Dato

La minería es el sector más importante que contribuye a la economía del país, tanto en recaudación como en inversiones; siendo su contribución al PBI nacional alrededor del 15%, además de representar cerca del 60% de las exportaciones totales del Perú y el 30% de los ingresos por renta de tercera categoría.

viernes, 31 de julio de 2015

¿US $ 63,114 millones de inversión?

La cartera estimada de inversión en minería se encuentra compuesta por 51 principales proyectos. Incluye proyectos de ampliación de unidades mineras, proyectos en etapa de exploración avanzada, así como proyectos con estudio ambiental aprobado o en proceso de evaluación y que en conjunto ascienden a US$ 63,114 millones.
Cartera estimada de proyectos mineros por mineral predominante en Perú_2015
Cabe mencionar que si bien existen otros proyectos en etapa de exploración que no se encuentran en la cartera, esta solo es de carácter referencial e intenta recoger las principales comunicaciones formales de los titulares mineros.
Algunos de los 51 proyectos mencionados no han definido su fecha de inicio de operación ni su fecha de construcción dado que aun se encuentran en etapa de estudios y permisos.

jueves, 23 de julio de 2015

Tendencia de inversión minera

La tendencia a la caída en la inversión de la exploración minera fue ya antes registrada en este espacio citando las causas y siguiendo esta línea, nos referimos a la publicación del diario Gestión que consigna la data gráfica de evolución de la inversión minera referenciándolo a cifras respecto al mismo mes del año anterior : 
"La inversión minera viene siendo golpeada desde fines del 2013 por un menor apetito de los inversores, ante la caída de precios de los metales en el plano externo y una excesiva regulación en el ámbito local que se agrava con los conflictos socio ambientales, y en mayo último llegó a su punto más álgido.
Los flujos de inversión hacia el sector minero se desplomaron un 33.1% en mayo a US$ 538 millones, su peor nivel en más de dos años y mantuvieron una tendencia negativa al acumular 14 meses de caídas consecutivas, según cifras del Ministerio de Energía y Minas.
Catorce meses de caídas consecutivas de la inversión minera en Perú.
Las áreas que más se han visto afectadas son el equipamiento de planta que cayó 61.5% a US$ 162 millones entre enero y mayo; y la construcción de infraestructura para el sector que bajó un 26.1% a US$ 394 millones en el mismo periodo, dos rubros claves.
Como es de esperarse, la exploración minera también registró una caída de 29.3% a US$ 187 millones, debido al menor atractivo que despierta el actual precio de los metales para los inversores.

Empresas

A nivel de empresas, una de las que mayor preocupación genera es la mexicana Southern Copper , que registra una caída de 38.7% en sus flujos de inversión hacia el país en los primeros cinco meses del año.
Y aunque minera Las Bambas es la segunda firma que más invierte en el sector en este momento (US$ 542 millones), su flujo en lo que va del año registra una caída de casi 5%. Sin embargo, debería recuperarse en la segunda parte del presente año de la mano con el avance de su proyecto en Apurímac.
Un caso distinto es el del proyecto minero Cerro Verde que mantiene un dinamismo en sus inversiones con un crecimiento de 10% entre enero y mayo debido a sus trabajos de ampliación en Arequipa.

Disminuiría más en próximos meses

(Por Juan Mendoza, director maestría en economía Universidad del Pacífico)
La impresión que tengo es que la inversión minera va a seguir cayendo, y deberíamos esperar peores caídas en los meses que vienen. Por un lado, no hay proyectos nuevos por lo menos hasta el próximo Gobierno y, además, va a haber más incertidumbre en el panorama electoral.
En realidad, no se ve que haya una señal clara de que se va a acompañar a los inversionistas. Los proyectos que están activos ahora son los que continúan, pero hay muchos que no se están iniciando.
Por otra parte, los menores precios de los metales ya deberían estar internalizados por todos los inversionistas en el sector; no debería esperarse que volvamos a tener una época de precios altos, sino más bien a que tiendan a quedarse estables.
El principal comprador de metales es China, cuya economía está creciendo a tasas cada vez menores. Sin embargo, este efecto se va a compensar un poco por la recuperación en el dinamismo de Estados Unidos y Europa.
Finalmente, las paralizaciones tienen poco que ver con el tema de la rentabilidad, sino más bien se explican por la alta conflictividad social, que ha sido mal manejada por la actual administración. La inversión minera tendería a caer más, salvo que se aclare un poco el panorama de las elecciones".

sábado, 18 de julio de 2015

Votorantim & Milpo

Según  publicación de Gestión , tomando como fuente Reuters, la empresa brasileña Votorantim aumentó a un 60.1% su participación en la minera peruana Milpo al conseguir un 10% más del capital en una oferta pública de adquisición  (OPA) de acciones, dijo la Bolsa de Valores de Lima (BVL).
La filial en Perú de la brasileña Votorantim adquirió 130.9 millones de acciones con derecho a voto de Milpo, a S/. 2.85 por papel o el equivalente a unos 118 millones de dólares, informó la BVL.
En la jornada del cierre de la OPA el papel común retrocedió un 6.25% a S/. 2.55.
La acción de inversión de la minera peruana Milpo, que no tiene derecho a voto, cerró sin cambios en S/. 1.5.
La OPA por los papeles de Milpo, la segunda productora de plomo y la tercera de zinc de Perú, había sido lanzada el 17 de junio.

domingo, 12 de julio de 2015

Impacto de concesión : $ 1`433,359

Según el contrato el Concesionario está comprometido a realizar Mejoras, en los bienes muebles e inmuebles destinados a optimizar la infraestructura y la calidad de los servicios. Las mejoras pueden tener el carácter de obligatorias, eventuales o complementarias, y se encuentran distribuidas en el periodo inicial y en el periodo remanente de la concesión. Algunos indicadores que dan cuenta del impacto de la concesión se anota seguidamente: AIJCh fue elegido como el “Mejor Aeropuerto de Sudamérica 2015” por séptimo año consecutivo, en una versión de los premios World Airport Awards celebrados en París, Francia.
Entre los años 2001 y 2014, el concesionario del AIJCh, la empresa LAP, ha entregado al Estado Peruano 1’433,539 millones de dólares por concepto de retribución, tributos y transferencias a entidades estatales. El monto equivale al 46,51% del total de los ingresos brutos de LAP, siendo que por cada dólar facturado deben transferirse 46,50 centavos al erario nacional.
Por su parte, el Estado destina una parte importante de estos fondos para subsidiar aeropuertos en otras regiones del país. Adicionalmente, LAP transfiere a Corpac el 50% de lo facturado por el servicio de aterrizaje y despegue en el AIJCh y el 20% de la Tarifa Unificada (TUUA) Internacional. Asimismo, LAP paga el 1% de sus ingresos brutos al Organismo Supervisor de la Inversión en Infraestructura de Transporte de Uso Público (OSITRAN) por concepto de tasa regulatoria. Las inversiones de LAP al cierre de 2014 ascendieron a 337,571,808 de dólares.
Con una inversión total de 13’252.067 dólares, se ejecutaron los siguientes proyectos: cerco perimétrico en los terrenos de expansión (fase 1); desarrollo de proyectos de transición, nueva pista, nuevo terminal y proyectos comerciales; remodelación de las áreas: TUUA, Control de salidas, Migraciones, Transferencia y Llegadas Internacionales; ampliación de Plataforma Norte, remodelación de la Torre Central (Piso 7 y otros), entre otros. El tráfico de pasajeros en el AIJCh continuó creciendo durante el año 2014, habiéndose registrado un total de 15,664,993 pasajeros, que representa un crecimiento de 5,1% respecto del año anterior.
Los ingresos brutos alcanzaron 271,9 millones de dólares,5,7% más que el año anterior. El crecimiento fue impulsado por el buen desempeño del tráfico de aeronaves y pasajeros (principalmente salidas nacionales), así como por los ingresos comerciales, que demostraron su dinamismo con un crecimiento de 8,7%. El crecimiento en el tráfico de pasajeros, aeronaves y carga, así como el ajuste en las tarifas de los servicios regulados por RPI-X, generaron de manera conjunta un incremento en los ingresos aeronáuticos de 4,7%, los cuales representan el 72% de los ingresos totales. 
Por su parte, los ingresos por concepto de TUUA crecieron un 5,4%, mientras que los ingresos por aterrizaje y despegue se incrementaron en 0,3%. Los ingresos por estacionamiento de aeronaves y servicios en rampa tuvieron crecimientos de 1,7% y 2,7%, respectivamente. Los ingresos por carga se incrementaron en 3,2% y los ingresos por peaje de combustible registraron un aumento de 7,3%, éste último impulsado por un incremento de 2,7% en el volumen de galones de combustible despachados. A su vez, el ingreso por el uso de Puentes de Embarque aumentó en 8,6%. Durante el año 2014 los ingresos comerciales aumentaron en 8,7%, representando el 27% del total de los ingresos.
Los ingresos por la Playa de Estacionamiento vehicular tuvieron un crecimiento de 11,7%, los de Ventas Minoristas (Retail) crecieron 6% y los de Comidas & Bebidas en 3,5%.
El EBITDA registrado en 2014 alcanzó los 85,12 millones de dólares, lo que significa un incremento del 9,1% respecto del año anterior. Por su lado, la utilidad neta del año ascendió a 45.55 millones de dólares (15% mayor que la registrada en 2013).

viernes, 10 de julio de 2015

Certificación Ambiental Global

Como parte de las medidas para acelerar la ejecución de inversiones, el gobierno del presidente Humala lanzó lo que se denominó el “paquete ambiental”, en el que se creó la figura de Certificación Ambiental Global (CAG). Su utilidad objetivo es reducir los plazos para la obtención de permisos ambientales en proyectos.
La permisología ambiental usualmente demora entre tres y cuatro años para completarse, pero ese plazo podría reducirse entre 8 y 18 meses. Esa es una de las principales conclusiones del estudio. “Cómo enfrentar la permisología ambiental”, preparado por el Estudio Rubio Leguía Normand por encargo de la Asociación para el Fomento de la Infraestructura Nacional (AFIN).
Para que suceda eso, el estudio propone algunas medidas para optimizar la CAG; como, por ejemplo, incluir a toda autoridad ambiental, que se integre a los Títulos Habilitantes e incluir a todas las categorías de estudio de impacto ambiental (EIA).

Más beneficios

Además de la importante reducción de plazos pre construcción, la CAG también tiene otros beneficios. En primer lugar, destaca que los sectores destino de este mecanismo se hacen más competitivos y, por lo tanto, son más atractivos para la inversión.
Asimismo, permite una mejor coordinación y gestión entre las entidades que participan en la cadena de evaluación de impacto ambiental. Con todo ello, al final, la aceleración de ejecución de obras apuntala el crecimiento económico.

Experiencias

Los otros tres países miembros de la Alianza del Pacífico (Chile, Colombia y México) tienen trámites ambientales mucho más simples que los del Perú.
Nuestro vecino del sur cuenta con un Servicio de Evaluación Ambiental que, a través de una ventanilla única, otorga permisos ambientales en simultáneo a la calificación favorable sobre un EIA.
En Colombia, se aprueba al mismo tiempo el EIA y los permisos ambientales. Todo esto lo hace su Autoridad Nacional de Licencias Ambientales y, al igual que Chile, a través de una ventanilla única.
Finalmente, en México existe la licencia ambiental única y todo lo referente al tema ambiental de los proyectos se evalúa, dictamina y resuelve en un solo proceso coordinado.
En ese sentido, AFIN subraya la necesidad de la creación de una ventanilla única virtual en el país para ganar más en el proceso.

Gonzalo Prialé,Presidente de AFIN:“Mejorando procedimientos ganamos años”

El Perú es un país pobre que se da el lujo de tener inversión parada, y eso no es un tema de confianza sino de puro trámite.
Aprobar la Certificación Ambiental Global sería de gran ayuda para agilizar los procedimientos ambientales e inicios de obras.
Para lo no ambiental proponemos una autorización única que permita avanzar los trabajos mientras se van cumpliendo los requisitos en paralelo.
Por poner un ejemplo: si dejamos de hacer cosas hoy día vamos a tener problemas de energía al 2022, pero con mejores procedimientos se puede ganar años de trámites e inclusive podríamos pensar en configurar un mercado de exportación de nuestros excedentes de energía.Si planeamos un país cada vez que tenemos un bache, estamos muertos.

El Número

$ 17,000 millones de dólares se tienen en proyectos que aún no han iniciado obras desde el 2005.

martes, 7 de julio de 2015

Expectativas de ganancias mineras

Una visión polémica sobre las expectativas de ganancias mineras sobre la base de las condiciones actuales de la industria minera peruana es presentada por el economista Germán Alarco Profesor Universidad del Pacífico, en los siguientes términos:
"Nadie desea que se frenen las decisiones de inversión en sector alguno incluido el minero. Sin embargo, muchos analistas y empresarios repiten insistentemente que los conflictos sociales y la tramitología son los culpables de su retracción. Antes se la atribuyeron al tema de Repsol, cuando en realidad era una solicitud de rescate de la propia empresa, luego a las leyes sobre la comida chatarra, de seguridad y salud en el trabajo, a los denominados sobrecostos laborales, entre otras excusas.
La inversión se frena principalmente por decisión de las propias empresas y para ello habría que especificar sus determinantes. Keynes (1936) señaló que dependen de dos variables: los rendimientos esperados respecto del valor de la inversión (eficiencia marginal del capital) y de la tasa de interés. Con estos elementos, el futuro de la inversión privada y de la economía para el mediano plazo no pinta muy bien. 
La expectativa de precios de casi todos los productos mineros para el mediano plazo es en el mejor de los casos constante (véase reportes del Banco Mundial y FMI) y tanto las tasas de interés como el precio de los bienes de capital irían hacia el alza. 
En las condiciones actuales se requiere que las empresas flexibilicen sus expectativas de ganancias hacia la baja. La rentabilidad actual es menor a la obtenida años atrás y no se espera que este panorama mejore por condiciones internas e internacionales. En 2014 todas las firmas de la Bolsa de Valores de Lima tuvieron un rendimiento neto promedio sobre el patrimonio del 10%, en 2013 fue 12% y años antes del 22%, pero siempre superior a los estándares internacionales. Ya se acabaron los tiempos fáciles. Hay que recordarles a muchos empresarios de ahora el ímpetu que tuvieron aquellos otros que hicieron empresa hace décadas atrás".

jueves, 2 de julio de 2015

Mejor infraestructura para crecimiento

El diario Gestión publica un recuento de las que considera cinco obras claves de los últimos 25 años que impulsaron el crecimiento y desarrollo peruano:

1._El gasoducto de Camisea

Construido entre el 2001 y 2004, permitió transportar el gas natural desde la selva del Cusco, cruzar los andes y llegar a la capital, en un trayecto de 729 kilómetros.
A la fecha 170 mil viviendas de Lima e Ica tienen acceso al gas, hay 360 mil vehículos convertidos y el 41% de la generación eléctrica del país se produce en base al gas de Camisea.
El uso del gas de Camisea ha permitido ahorrar a todos los usuarios, directos e indirectos, un acumulado de 27 mil millones de dólares. 
Ahora empezó la construcción del gasoducto del sur y también está previsto un futuro gasoducto al norte. Actualmente se tiene 25% de la matriz energética con diesel y se espera cubrir en algún momento con 100% empleando gas natural, hidroeléctricas, eólicas y solares.

2._El túnel trasandino de Olmos

Entre el 2007 y 2011, como parte del proyecto Olmos, se construyó el túnel trasandino, con un trayecto de 19 kilómetros. El túnel permitirá el trasvase de las aguas del río Huancabamba, de la vertiente del Atlántico, hacia la vertiente del Pacífico, para irrigar 38 mil hectáreas en la región de Lambayeque.

3._El Tren eléctrico

La línea 1 del tren eléctrico ha cambiado la vida de miles de limeños. Sus 34 kilómetros de recorrido entre Villa El Salvador y San Juan de Lurigancho reducen a 50 minutos lo que antes tomaba casi tres horas. Ante la gran demanda hay planes para ampliar el número de vagones y pronto inicia la construcción de la Línea 2, de un total de 6 líneas previstas.

4._Modernización del Aeropuerto Jorge Chávez

Tras su concesión el 2001, entre los primeros cambios que vio en el aeropuerto figuran la ampliación del terminal de pasajeros de 39 mil m² a 65 mil m², la instalación de siete puentes de abordaje y la de una nueva zona de embarque nacional e internacional.
El aeropuerto ha sido premiado varias veces como el mejor de Sudamérica, destacando por su limpieza y orden y variada oferta comercial.

5._Carretera Interoceánica Sur

Este megaproyecto, con sus 2,540 kilómetros de extensión, ha logrado integrar a nueve departamentos del sur.
Cinco tramos de la Interoceánica Sur ya están funcionando y se podría viajar a Sao Paulo (Brasil) en una buena carretera. 

Bonus Track: próximas obras

-El Gasoducto Sur Peruano: llevará el gas natural a las regiones del sur del país.
-Líneas del tren eléctrico: en las próximas semanas iniciará la construcción de la Línea 2, que será subterránea.
-Irrigación Majes: se construirá la represa de Angostura, el túnel de trasvase e irrigará 38,000 hectáreas de cultivo en las pampas de Siguas y Arequipa.
-Modernización de la refinería de Talara: construcción de una nueva planta para elevar su producción y calidad de refinamiento.
-Villa Panamericanos 2019: La villa deportiva se ubicará en Lima y albergará a 10 mil deportistas que participarán en el certamen.
-Centro de Convenciones de Lima: Ubicado al costado del Museo de la Nación, albergará a 10 mil personas.
-Vía Parque Rímac: incluye nueve kilómetros de vías nuevas ubicados entre el Puente Huáscar y el límite con el Callao. Se construye un túnel debajo del río Rímac y 12 Viaductos.
-Nuevo aeropuerto del Cusco: Estará ubicado en la localidad de Chinchero y tendrá nivel internacional.

lunes, 29 de junio de 2015

- US$ 67 mil millones en minería

En el Perú, cuando hablamos de minería, la asociamos a dos cosas: riqueza y conflictos sociales. En los últimos seis años, hemos sido más sensibles a los conflictos sociales ante la presencia de la industria minera. Estos han desembocado, en muchas ocasiones, en violencia por parte de las fuerzas del orden y de la comunidad afectada.
Algunos ven a la minería como una vía para el desarrollo y como actividad responsable en gran parte de la dinamización de la economía; otros como la principal protagonista de la destrucción del medio ambiente. La industria minera representa cerca del 11% del Producto Bruto Interno (PBI).
Asimismo, según el Banco Central de Reserva del Perú (BCRP), el crecimiento del PBI se estima en 3.9%, 5.3% y 5.8% para el 2015, 2016 y 2017, respectivamente; se sustenta principalmente en el incremento de la inversión minera, que, se prevé, aumente en 11.9% en el 2015 y 17.8% en el 2016.

LAS CIFRAS HABLAN

Según el último informe elaborado por el Instituto Peruano de Economía (IPE), como resultado del retraso de los proyectos mineros en el país, durante el periodo 2008-2010 la economía dejó de crecer 2.9 puntos porcentuales, mientras que entre el 2011 y el 2014 se perdieron 13.4 puntos porcentuales de crecimiento.
Del total de proyectos mineros para ser desarrollados del 2008 al 2014, el 22.8% fueron ejecutados, el 36.2% de los proyectos aún se encuentran en plazo de ejecución, el 8.7% han sufrido demoras por factores internos (propios de las empresas) y el 32.3% (15 proyectos) han sido paralizados o retrasados por conflictos sociales y trabas burocráticas.
El estudio toma solo este último grupo y lo analiza en el periodo descrito.
Así, la inversión que el país dejó de percibir en los últimos siete años es de 21,515 millones de dólares, mientras que la producción perdida en dicho periodo fue de 24,640 millones de dólares.
Si consideramos ambos montos y se suma el impacto en el resto de la economía (US$21,048 millones), el Perú perdió 67,203 millones de dólares.

A MANERA DE EJEMPLO

En 2014, si los proyectos mineros se hubiesen ejecutado de acuerdo con el plan inicialmente trazado, el PBI habría crecido 6.8% en lugar del magro 2.4%. La minería habría permitido generar más puestos de trabajo, incrementar la recaudación de impuestos y reducir la pobreza a pesar de la desaceleración internacional (el menor crecimiento de China, la crisis de Europa y el estancamiento de Estados Unidos).

OPINIONES

Roque Benavides, presidente del directorio de la minera Buenaventura, señala que, en los últimos cuatro o cinco años, han puesto en producción La Zanja y Tantahuatay en Cajamarca; Mallay, muy cerca de Lima, en Churín; la planta procesadora de Río Seco y la hidroeléctrica de Huanta.
Benavides enfatiza en que “hay proyectos que se han podido realizar, pero obviamente Conga, Tía María y Santa Ana han hecho primeras planas. Nuestros proyectos no han hecho primeras planas y venimos trabajando, operando y produciendo, con dificultades, pero hemos logrado seguir adelante, así que tenemos que ver las cosas con cierto optimismo. Quisiéramos tener mucho más respaldo, pero eso no nos va a vencer, vamos a seguir operando; tenemos una responsabilidad muy grande. En nuestro caso, son 12,000 personas que trabajan en la empresa. Mucha gente no es consciente de la cantidad de personal que puede tener una compañía minera, sobre todo en zonas rurales alto andinas descentralizadas de nuestro país”.
Rodrigo Prialé, gerente general de Gerens, reporta que, mientras en el 2007 el Perú tenía una participación de 5.6% en la minería mundial, actualmente solo bordea el 4%. Así, para Prialé, “la preponderancia del Perú en la industria minera mundial ha caído como consecuencia de un crecimiento interno de la industria mucho más lento”.
Cartera de proyectos y conflictos socioambientales_ Mayo_2015 

LOS CONFLICTOS SOCIALES

Según el último reporte de la Defensoría del Pueblo, a la fecha existen 95 conflictos socioambientales en el sector minero. La mayoría se concentra en la sierra sur (Cusco, Ayacucho, Huancavelica, Puno, Apurímac y Junín).
Kurt Burneo, economista y vicerrector de Investigación de la Universidad San Ignacio de Loyola, remarca que hoy ve el caso de Tía María como una reproducción del conflicto de Conga, que vivió cuando estaba en el gabinete. Al respecto, comenta que “muchas veces las empresas mineras no toman una parte muy activa a la hora de buscar la legitimidad social entre las comunidades. Además, la lógica del Gobierno Nacional muchas veces va en contra de la lógica del gobierno regional o municipal, sencillamente porque a veces el gobierno local hace demasiado cálculo político a la hora de tomar el liderazgo para poder explicar a la población los beneficios que tiene la actividad minera y deja aislado al Gobierno Nacional. En ese sentido, en Tía María y Conga había gobiernos regionales contrarios al desarrollo del proyecto. Las relaciones no solo son de no colaboración, sino de oposición. Pero, en ambos casos, otro elemento común que encuentro es que las empresas mineras no desarrollaron una parte proactiva que creo que les correspondía”.
De otro lado, Carlos Arredondo, alcalde provincial de Yauli-La Oroya, afirma: “Es paradójico que, mientras en proyectos como Conga (Cajamarca) o Tía María (Arequipa) la población rechaza la presencia de la minera, en La Oroya la población se moviliza exigiéndole al Estado que existan la minería y la metalurgia. Considero que la minería es la principal y única fuente económica de toda la población. Dependemos del funcionamiento del complejo metalúrgico, pues este genera el dinamismo de diversos sectores”.

ALGUNAS REFLEXIONES

La postergación de los proyectos mineros de mediana o gran envergadura tiene un impacto en la economía del país y generalmente sobre el bienestar de todos los peruanos; eso es absolutamente incuestionable,indica Rodrigo Prialé.
Raúl Jacobs, vicepresidente del Comité Sectorial Minero de la Sociedad Nacional de Minería, Petróleo y Energía (SNMPE), señala: “Estamos dejando de generar puestos de trabajo bien remunerados que resultan de gran importancia en las zonas donde se encuentran los proyectos, que usualmente coinciden con zonas alejadas de los grandes centros urbanos o zonas de ingresos deprimidos”.
Roque Benavides hace una autocrítica e indica: “Las empresas tenemos que aprender a integrarnos con la comunidad muchísimo más. Tenemos que aprender su cultura, su idioma. Uno va a la casa de una persona que lo invita y habla en el idioma de la persona. Yo creo que hay un tema cultural, lingüístico y de tradiciones que hay que respetar. Ciertamente, nos preocupamos de esos aspectos, que podrían ser considerados blandos, pero que son duros en el fondo. Hay que valorizar la cultura y el idioma con los que tenemos que tratar”.
Para Kurt Burneo, el Perú es un país minero y eso es algo que no se puede obviar. Además, indica: “Es un absurdo decir no a la minería, pero se entiende que estamos hablando de una actividad minera que sea respetuosa del medio ambiente, que tenga un derrotero claro cuando se abordan yacimientos mineros, con perspectivas de las actividades económicas que tienen las comunidades que se encuentran alrededor del yacimiento minero y como se practica en otros países, como Canadá o Australia, donde, de la mano de la minería, se pueden desarrollar otras actividades económicas”.

EXPECTATIVAS

Carlos Arredondo espera que un nuevo gobierno pueda tener mejores políticas en cuanto a medio ambiente y actividad minera para que, sobre todo, haga un trabajo de sensibilización a las comunidades, a las poblaciones donde hay presencia minera. El alcalde remarca: “Esto le faltó hacer al gobierno actual en las zonas sur y norte del país. En La Oroya lo que falta es comunicación. Al gobierno le faltan mecanismos para poder impulsar proyectos mineros importantes en el país”.
Roque Benavides señala que espera que el próximo gobierno evalúe la eficiencia de la denominada “permisología”, que en muchos casos ha sido un proceso que ha trabado el desarrollo de operaciones sencillas como también de ampliaciones.
Kurt Burneo destaca, como parte de su experiencia en el Banco Interamericano para el Desarrollo (BID), “la necesidad de diferenciar las demandas de las poblaciones afectadas por el desarrollo de la actividad minera. Así, cuando se soslaya la diferencia de agendas y se trata de aplicar un mismo molde, se entra en problemas. En el caso de Tía María, faltó una mejor evaluación de cuáles son las actividades importantes, cuál es el nivel de ingreso de la población involucrada”.
Prialé enfatiza que la minería es un importante generador de divisas, pero se deben buscar otros sectores que de manera paulatina aporten al PBI, como ocurre en otros países. Raúl Jacobs manifiesta que el Estado debe cumplir su rol de asegurar la tranquilidad pública, además de respetar los derechos de las comunidades y los procedimientos establecidos.

martes, 23 de junio de 2015

Perú y Bolivia Vs Minería ilegal

Perú y Bolivia tienen la imperiosa necesidad de luchar contra la minería ilegal, el narcotráfico y la trata de personas en la zona fronteriza, sostuvo hoy el embajador peruano en La Paz, Luis Chimoy.
“Otro aspecto de la relación bilateral lo constituyen la imperiosa necesidad de actuar de manera conjunta y también coordinada para terminar con los ilícitos que se dan en la frontera común, como la minería ilegal, narcotráfico, trata de personas y otros”, declaró a la Agencia Andina.
En ese sentido, destacó que estos temas que se multiplican de manera alarmante en la frontera común, serán abordados en el encuentro presidencial y el primer gabinete binacional, a realizarse este martes 23 de junio en Puno.
Refirió que estos ilícitos que afectan la moral, la economía y la seguridad de las poblaciones que viven en los límites entre ambos países, y por ello será un tema importante en el diálogo que sostendrán el presidente Ollanta Humala y su homólogo boliviano, Evo Morales.
“Los delincuentes aprovechan la posibilidad de burlar la justicia pasando de una frontera a otra, los esfuerzos que realizamos en Perú y Bolivia no son suficientes, entonces hay que llevar a cabo acciones coordinadas y conjuntas”, agregó.
Otro tema de interés en la opinión pública boliviana que ha estado presente en la agenda mediática del país altiplánico es la preocupación por la contaminación del Lago Titicaca, que ha producido la muerte de algunas especies de aves y peces que habitan en la zona.
“Este tema será parte de un primer grupo de asuntos que se abordará en el evento, la preservación, protección, remediación y aprovechamiento conjunto de los recursos hídricos que compartimos Perú y Bolivia, entre ellos el lago Titicaca, símbolo de la fraterna vecindad entre ambos pueblos”, señaló.

Laudato si´_ Alabado seas

El pasado día 18 de Junio del 2015, se inició la difusión de la encíclica Laudato si’ en la que el Papa Francisco exhorta al mundo a preservar a la madre Tierra.
Algunos extractos del documento son:
«Laudato si’, mi’ Signore» – «Alabado seas, mi Señor»,cantaba san Francisco de Asís. En ese hermoso cántico nos recordaba que nuestra casa común es también como una hermana, con la cual compartimos la existencia,y como una madre bella que nos acoge entre sus brazos: «Alabado seas, mi Señor,por la hermana nuestra madre tierra, la cual nos sustenta, y gobierna y produce diversos frutos con coloridas flores y hierba».
El desafío urgente de proteger nuestra casa común incluye la preocupación de unir a toda la familia humana en la búsqueda de un desarrollo sostenible e integral, pues sabemos que las cosas pueden cambiar.
El Creador no nos abandona, nunca hizo marcha atrás en su proyecto de amor, no se arrepiente de habernos creado. La humanidad aún posee la capacidad de colaborar para construir nuestra casa común.
Deseo reconocer, alentar y dar las gracias a todos los que, en los más variados sectores de la actividad humana, están trabajando para garantizar la protección de la casa que compartimos.
Merecen una gratitud especial quienes luchan con vigor para resolver las consecuencias dramáticas de la degradación ambiental en las vidas de los más pobres del mundo. Los jóvenes nos reclaman un cambio. Ellos se preguntan cómo es posible que se pretenda construir un futuro mejor sin pensar en la crisis del ambiente y en los sufrimientos de los excluidos.
El agua potable y limpia representa una cuestión de primera importancia, porque es indispensable para la vida humana y para sustentar los ecosistemas terrestres y acuáticos. Las fuentes de agua dulce abastecen a sectores sanitarios, agropecuarios e industriales. La provisión de agua permaneció relativamente constante durante mucho tiempo, pero ahora en muchos lugares la demanda supera a la oferta sostenible, con graves consecuencias a corto y largo término. Grandes ciudades que dependen de un importante nivel de almacenamiento de agua, sufren períodos de disminución del recurso, que en los momentos críticos no se administra siempre con una adecuada gobernanza y con imparcialidad. La pobreza del agua social se da especialmente en África, donde grandes sectores de la población no acceden al agua potable segura, o padecen sequías que dificultan la producción de alimentos. En algunos países hay regiones con abundante agua y al mismo tiempo otras que padecen grave escasez.
La deuda externa de los países pobres se ha convertido en un instrumento de control, pero no ocurre lo mismo con la deuda ecológica. De diversas maneras, los pueblos en vías de desarrollo, donde se encuentran las más importantes reservas de la biosfera, siguen alimentando el desarrollo de los países más ricos a costa de su presente y de su futuro. La tierra de los pobres del Sur es rica y poco contaminada, pero el acceso a la propiedad de los bienes y recursos para satisfacer sus necesidades vitales les está vedado por un sistema de relaciones comerciales y de propiedad estructuralmente perverso.
Es necesario que los países desarrollados contribuyan a resolver esta deuda limitando de manera importante el consumo de energía no renovable y aportando recursos a los países más necesitados para apoyar políticas y programas de desarrollo sostenible. Las regiones y los países más pobres tienen menos posibilidades de adoptar nuevos modelos en orden a reducir el impacto ambiental, porque no tienen la capacitación para desarrollar los procesos necesarios y no pueden cubrir los costos.
Por eso, hay que mantener con claridad la conciencia de que en el cambio climático hay responsabilidades diversificadas y, como dijeron los Obispos de Estados Unidos, corresponde enfocarse «especialmente en las necesidades de los pobres, débiles y vulnerables, en un debate a menudo dominado por intereses más poderosos».
Necesitamos fortalecer la conciencia de que somos una sola familia humana. No hay fronteras ni barreras políticas o sociales que nos permitan aislarnos, y por eso mismo tampoco hay espacio para la globalización de la indiferencia.
El ambiente humano y el ambiente natural se degradan juntos, y no podremos afrontar adecuadamente la degradación ambiental si no prestamos atención a causas que tienen que ver con la degradación humana y social. De hecho, el deterioro del ambiente y el de la sociedad afectan de un modo muy especial a los más débiles y necesitados. Dado que todo está íntimamente relacionado, y que los problemas actuales requieren una mirada que tenga en cuenta todos los factores de la crisis mundial, propongo que nos detengamos ahora a pensar en los distintos aspectos de una ecología integral, que incorpore claramente las dimensiones humanas y sociales.